11 de julio de 2017
Para los que somos seguidores de Auserón desde sus inicios en Radio Futura, este fue un concierto que nos trajo al compositor del presente. Y aunque temas suyos tan célebres como “El canto del gallo” o “La negra flor”, sin olvidar “Anabel Lee”, no sonaron con los matices pop suyos tan particulares, pudimos respirar la esencia de su música, gracias a sus letras y a su inconfundible voz.
Aparte de los temas mencionados anteriormente, de su etapa como Radio Futura, algunos de los temas que sonaron espléndidamente fueron “Obstinado en mi error”, “No más lagrimas” o “La misteriosa” que caracterizan su carrera en solitario.
Esta unión, con la fuerte incidencia del trabajo de la Banda Municipal de Barcelona, dio como resultado a un Auserón sosegado, pero con la misma garra en su alma a la que nos tiene acostumbrados.
Los aproximadamente cuarenta músicos que componen esta banda, la participación especial, de Joan Vinyals a la guitarra acústica, todos bajo la dirección de Ricardo Casero, fueron el perfecto acompañamiento para que Vagamundo, el nombre elegido para este espectáculo, haya dado a luz un resultado inolvidable.
Una vez terminado el concierto, bises incluidos, y como regalo a los presentes, Auserón cerró la noche cantando un último tema a viva voz, sin ayuda del sistema de sonido y solo con la Banda sonando de fondo a baja intensidad. Este fue el colofón que robó definitivamente el corazón de los allí presentes.
Aunque el aforo no se completó, los asistentes demostraron el cariño y el afecto que se le tiene al artista maño en nuestra ciudad. Los aplausos y los vítores a los intérpretes dieron buena fe de ello. Una perfecta apuesta para el Festival.
Crítica de Juanjo Duque publicada en Platea.