16 de junio de 2017
Santiago Auserón, y por tanto su alter ego Juan Perro, ha estado conmigo prácticamente toda la vida. Radio Futura entró en mi vida muy pronto, apenas tenía doce o trece años, y desde entonces su música siempre me acompaña. Esta semana volví a un concierto del que fuese líder de Radio Futura, grupo indispensable en la música española, en el que acompañaban a Santiago su hermano Luis y el tristemente fallecido Enrique Sierra.
Mi primer y único concierto de Radio Futura fue en agosto de 1989, en el patio del gaditano colegio de San Felipe Neri, en un verano en el que pasaron por allí bandas como Gabinete Caligari, Ilegales o Alaska y Dinarama.
Yo entonces tenía quince años, en pleno verano, y lo mejor de ese concierto fue, sin duda, descubrir a un verdadero artista. Con todas las letras. Y en mayúsculas. Aquella misma noche, volvimos a La Barrosa, donde me vi un rato con mis amigos. Después, paseando hacia casa por el paseo marítimo, era imposible no tararear ‘Luna de Agosto’ observándola en el cielo.
Los seguidores de Radio Futura, yo al menos, lo pasamos verdaderamente mal tras la disolución del grupo, pero a partir de ahí estamos conociendo en toda su dimensión a Santiago. Bueno, a Juan Perro. Su primer disco en solitario, Raíces al viento, fue el inicio, o mejor la continuación, de su continuo estudio musical, de los ritmos africanos, caribeños… Su libro El ritmo perdido, editado por Península, es de lectura obligada para entender y valorar las distintas influencias que han ayudado a la creación musical de Auserón. En mi opinión, Raíces al Viento es el mejor disco de Juan Perro. Les dejo la canción ‘Señora del Mar’.
Tras ir dando a conocer distintas canciones durante muchos conciertos, tanto en España como en el extranjero, Juan Perro ha publicado su séptimo disco, ‘El viaje’, un trabajo íntimo, acompañado sólo por su guitarra. Esta semana en Sevilla, con un intenso calor, Santiago lo presentó junto a su banda y debo reconocer que me impactó más de lo esperado.
Auserón sigue estando de diez sobre el escenario, eso es innegable, y concluyó haciendo algo que gusta mucho en sus actuaciones, que no es otra cosa que finalizar con una de las canciones de Radio Futura, en esta ocasión todo un clásico como ‘La estatua del jardín botánico’.
Pero que nadie se lleve a engaño. Un concierto de Juan Perro no es un revival de Radio Futura. Echo de menos Radio Futura, sí, pero la evolución musical de su líder hace que esa añoranza apenas se reduzca precisamente a los momentos en los que nos regala joyas como la que anoche sirvió para cerrar el telón en el Centro Andaluz de Arte Contemporáneo. Volveremos a vernos pronto.
Crítica de Salava Moreno para su Blog Desde la orilla.
